- Fue muy difícil mi adaptación a la ciudad ya que no contaba con ningún recurso económico por la lesión, pero siempre encontré gente que me ayudo a seguir en mi camino y en mi sueño.
Hay gente que dice que "el arte es aquella actividad o producto realizado por el ser humano con una afinidad estética o comunicativa, mediante la cual se expresan ideas, emociones o, en general, una visión del mundo". Con una definición tan exótica como esta, es obvio que quizás ahora estemos más confundidos en cuanto a la definición de este concepto. Y es que las experiencias de unos inciden, o más bien influyen positiva o negativamente en el actuar de otros. Quizás por ello el arte para mí sea sinónimo de danza, ¿o por qué no? de Javier Melgarejo, el hombre del folclor contemporáneo.
Javier Melgarejo es una de aquellas personas "especiales" que transmiten sus sentimientos y emociones de manera distinta a la que estamos acostumbrados los seres "supuestamente" normales. Es uno de aquellos titanes que a través de la danza, incrusta en el interior de su público sensaciones tan fuertes como la melancolía, por sólo mencionar un ejemplo. Pero, ¿quien es este hombre al cual yo me atrevo a comparar con el mismísimo concepto "arte"? Hoy en Fragata Cultural, conoceremos al folclorista contemporáneo: JAVIER MELGAREJO, quien al preguntarle sobre que lo motivó a entrar en el mundo de la danza esto fue lo que nos respondió:
Respuesta: Nací en Lanus provincia de Buenos Aires,
Argentina, un 11 de Septiembre de 1978. Cuando tenia 6 años nos mudamos a la Villa de Merlo, San Luis, por el trabajo de mi papá, que lo
trasladaron con la empresa donde trabajaba. Allí fue donde tuve mi primer
contacto con la danza. Yo siempre fui
muy tímido y acompañando a una amiga a una clase de folclor, las profesoras
pensaron que yo también quería tomar la clase y me designaron un lugar, yo de vergüenza no dije nada y recibí mi primera clase.
Desde
ese día nunca mas deje de bailar. Bailaba en el patio, en el jardín, en mi
casa, en la escuela y tomaba clases de folclor. Poco después ya bailaba en un ballet de ahí
de la ciudad de Merlo. Con el tiempo, mis profesoras dejaron de dar clases porque viajaron
a estudiar a la capital, y con un grupo de amigos, armamos otra agrupación y empezamos
de forma independiente a dar clases y bailar. Yo tenía ya 15 años y daba las
clases, armaba las coreografías, bailaba y dirigía el ballet La Salamanca con el que sigo trabajando en la actualidad.
Así viví
toda mi adolescencia y mi secundaria, estudiando, dando clases y bailando
folclor. A todo esto empecé a tener mucha curiosidad
sobre otras técnicas de baile, mas porque veía bailarines en la tele que
admiraba, los cuáles grababa para practicar sus pasos y coreografías.
Después
de tomar algunas clases de ballet clásico, moderno y tango, en algunos lugares que
llevaban profesores de visita comencé a sentir necesidad de viajar y hacer cursos para perfeccionarme, como en efecto lo hice durante unos años, tomando cursos en Buenos Aires y San Luis Capital, de ballet clásico y folclor.
¿Algún artista en especial de tu rama al que admires o que haya incidido en tu carrera?
Mis primeros grandes referentes fueron Coqui y
Pajarin Saavedra, dos bailarines Santiagueños que estuvieron en Europa mucho
tiempo y lograron fusionar el folclor con otras técnicas de danza. Con ellos
tome durante casi cinco años clases y cuando tuve 22 años me lesione una
rodilla en una clase y viaje a realizarme estudios que nunca los hice porque me dieron turnos a un año y comencé a hacer
unas clases de rehabilitación y decidí instalarme definitivamente.
A los
meses ya estaba bien de la rodilla y empecé a estudiar danzas clásicas y Contemporánea. Fue muy difícil mi adaptación a la ciudad ya
que no contaba con ningún recurso económico por la lesión, pero siempre encontré
gente que me ayudo a seguir en mi camino y en mi sueño.
Uno de los mas importantes incentivos para
viajar a Buenos aires y quedarme era que a los 20 años tuve un hijo y me separe. La madre se vino a vivir acá y estar cerca de el era una de las cosas que mas
quería en el mundo.
Al recuperarme de la lesión empecé a tomar clases de ballet clásico y jazz contemporáneo, con diferentes profesores que me becaban y
entre a bailar en una compañía de Jazz Ensamble. Arme un grupo de folclor
contemporáneo con el que investigamos durante tres años. En el año 2005 entre
en el Ballet del Mercosur que dirige Maximiliano Guerra .
JAVIER MELGAREJO:
- Profesor superior de Danzas Folklóricas.
- Integrante y coreógrafo del Ballet del Mercosur que dirige Maximiliano Guerra.
- Director del ballet La Salamanca, folclor contemporáneo, de la Villa de Merlo San Luis desde 1995 a la actualidad.
- Como director y coreógrafo ha realizado obras de folclor contemporáneo como: En cuerpo y alma (Ballet Municipal Villa de Merlo San Luis), El otro camino, Hijos de la tierra, Contacto, Ausencia, El canto del viento, Gualicho, Ritual, golondrinas entre otras, todas estas con el Ballet La Salamanca.
- Coreógrafo de la obra Hasta el cuero para la Cia. Primer movimiento (Dir: Jorgelina Platania).
- Reposición y dirección de la obra Ritual con el Ballet del Mercosur de Maximiliano Guerra con la cual en 2009 y 2013 Ganaron el premio Estrella de mar como mejor espectáculo de Danzas.
- Coreógrafo de la obra EL ELIXIR DE VERONA, Versión contemporánea de la tragedia Romeo y Julieta de William Shakespeare.
- Desde 1995 dicta clases de Folklore, realizando paralelamente clases y talleres de formación en danzas clásicas, contemporáneo, tango, improvisación contribuyendo todo esto a la creación de folklore contemporáneo técnica con la que actualmente dicta cursos en el interior del país y Buenos Aires.
- Para contactarlo escribir a javiermelgarejo@outlook.com. Teléfono 4775-5697.
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